Andres Pastorini nos cuenta de "Noches Improvisadas"
Conversamos sobre el origen del programa, de qué trata y cómo es la dinámica, las motivaciones para llevar adelante el proyecto, los desafíos de la impro en radio y más.
24 Abr 2021
¿Cómo se compone el equipo? ¿Quienes se encargan de qué cosas?
El equipo base está constituido por Mercedes Garcia (improvisadora y actriz) que actúa y también participa de la conversación en el programa; Ale Garcia que, además de actuar, conduce el programa conmigo (entre los dos nos turnamos para crear una historia cada uno tomando el rol de narrador) y también están Matute Correa, Maxi Constenla y, cuando necesitamos a alguien más se suma Daniel Calegari. Lo ideal sería sumar distintos actores y actrices en cada programa, para poder ir rotando y tener variedad de opciones.
¿Cómo surge Noches Improvisadas? ¿Directo en la radio o con público en vivo?
Si bien el grupo que tenemos se conformó hace tiempo ya que hacíamos impro juntos, Noches Improvisadas no salió de un proyecto que ya existiera. En 2019, antes de la pandemia, tuvimos el espectáculo “¿dónde está el guionista?” como grupo, pero Noches Improvisadas surgió de una inquietud por seguir haciendo impro de otra forma. A mi entender la radio puede ser una plataforma para seguir haciéndolo a pesar de que no haya habilitación de teatros; y también por una inquietud más personal, y es que la radio tiene su encanto y es fuerte en Uruguay, y las historias con la voz y con la música a mi me encantan.
¿Cómo fue el proceso para salir en radio?
Yo soy totalmente nuevo en el tema radio, entonces lo primero fue empezar a buscar en internet los contactos de las distintas radios y llamar. Cuando me atendían o me respondían el correo, pedía hablar con un gerente comercial y les iba contando de la propuesta. Fui honesto con nuestra experiencia radial, por suerte la idea siempre tuvo buena recepción, otra cosa en la que me fijaba era en quienes no tenían programa fijo en la noche, ya que nuestra idea era salir martes o jueves a la noche, y necesitábamos el hueco. Fui conversando y fueron surgiendo posibilidades. Dimos con La R, y la verdad que quedé muy contento. Nos trataron excelentemente y me quedé muy agradecido. Ahora se va a mudar y modernizar el estudio, hay un plan de crecimiento y esto, para mi, fue un golazo, contratamos el espacio y quedamos muy contentos. Fue un gran logro, y si bien el camino fue duro, aprendí un montón y fue muy enriquecedor.
¿Te imaginás más espectadores a través de internet o por radio mismo?
En una primera instancia me imagino más gente por internet, pero es verdad que hay mucha competencia; televisión, streaming, otros programas, etc. Yo tenía la idea de que cada episodio quede colgado y se pueda descargar posteriormente, para poder llegarle a más gente y que se pueda escuchar luego. Eso no quita que busquemos lograr tener un fuerte público escuchándonos en vivo, que participe e interactúe para poder crear las historias.
Tenemos la ilusión de que mucha gente nos siga por la radio, sabemos que la radio en la noche tiene mucho público; gente que está trabajando o que está sola. Creemos que nuestra propuesta, que es para toda la familia, puede ser una gran compañía.
¿Cuál es el motor que los impulsa?
A nosotros nos apasiona lo actoral y la improvisación. La radio es un medio muy importante, y la posibilidad de estar ahí nos ilusiona. Queremos crecer como artistas, actores, improvisadores. Para crecer se necesita reconocimiento, no hay otra forma; y la radio es una plataforma que puede tener un alcance muy grande.
¿Qué respuesta han tenido de la audiencia?
Nos escriben mucho por Instagram y por Facebook. A medida que pasan los programas, notamos que más gente nos escribe, particularmente durante el programa que es el combustible que más necesitamos.
¿Cómo podrías explicar la propuesta en pocas palabras para quienes aún no los escuchan? ¿Cuál es la invitación de Noches Improvisadas Radioteatro?
Es un programa de compañia. Buscamos construir radioteatro de forma interactiva con la audiencia. La dinámica es la siguiente: arrancamos el programa con una sección que llamamos “tema sobre la mesa” o “divague”. Traemos temas o reflexiones para conversar, mientras que la audiencia va sumando temas. El narrador se inspira a partir de esto y anuncia el título de la historia. En el último programa arranqué con “Al otro lado del mar”, inspiración a raíz de lo que estábamos hablando, sin tener idea de cómo iba a seguir. Tenemos un corte mientras buscamos música y luego comenzamos con el primer acto. Hay 3 actos, y en cada uno hay cortes donde invitamos a la audiencia a que de sugerencias sobre los personajes, los eventos, la interacción, etc. El narrador empieza la historia, la va construyendo, y de repente introduce un personaje o dos, interpretados por los actores y actrices. Se va construyendo la escena, surgiendo cosas y fluyendo entre la interacción de los personajes y lo que va creando el narrador.
¿Qué diferencias tiene el radioteatro con la impro con público en vivo? ¿Cuáles son los pro y contras de cada propuesta?
Es un desafío más grande en la radio, porque muchas herramientas que uno tiene con el cuerpo o con el entorno acá no están. Todo tiene que resolverse con la voz. Ale García o yo estamos con la computadora poniendo música, poniendo sonidos, pensando la historia, hablando. También hay que tener muchísimo cuidado con el tema personajes, en el teatro cambiando un gesto ya das a entender el cambio de personaje, pero acá hay que hacerlo sólo con la voz. A esto último se le suma que las personas no podemos registrar muchas escenas, en la cabeza, sólo escuchándolas; entonces las escenas y la cantidad de personajes por escena tiene que ser más reducida cuando actuamos sólo con la voz. La propuesta es mucho más compleja, pero está buenísima, y nos pone muy contentos el desafío.